miércoles, noviembre 08, 2006

PARCHE ANTES DE LA HERIDA

Hace exactamente un mes comence mi entrenamiento para el 10K de nike. Este nuevo desafio implicaba algo inedito para mi como es correr 10 kilometros y teniendo antecedentes muy malos, porque si bien siempre he sido algo rapido, mi resistencia desde los 5 años siempre ha sido una miiiierda. Pero bueno, en mi vida deportiva he tomado muchos desafios, unos exitosos y otros no.... este NO lo sera.
Mi entrenamiento se complementaba a mis cuatro "sesiones" semanales de karate, un entrenamiento extremadamente duro pero que no sirve para sacar resistencia. Para esta funcion, mi entrenamiento constaba de trotar cinco kilometros diarios, pero comenzo con una gravisimo error de logistica, ya que durante los primeros diez dias de sali a trotar de noche... la diferencia con hacerlo de dia y a pleno sol es gigantesca. De noche puedo hacer los 5K en 27 minutos facilmente. De dia (12-1 de la tarde) con sol y poca agua, apenas puedo hacerlo en 43 mins. y literalmente muriendome. Este error me significo perder dias muy valiosos de entrenamiento e ir frustrandome dia a dia. Para peor, la diferencia entre trotar en maquina, pista o pasto (como lo he hecho toda mi vida) a hacerlo en la calle, tambien es muy grande, por lo que mis gemelos y tobillos sintieron el efecto.
Han pasado 15 dias de "duro" entrenamiento y apenas puedo terminar los cinco kilometros. Quizas si mi rutina hubiese partido por una estricta y eficiente dieta, las cosas habrian cambiado radicalmente. ¿Que paso? Lo acepto: no me la puedo con 10K. Si al principio mi meta era hacer una muy digna participacion y ganarle a mis compañeros que corren, ahora es otra: sencillamente terminar la carrera.
Pero creo que gane algo despues de todo (el parrafo cliche es infaltable en esta clase de cronicas). Ademas de haber bajado casi ocho kilos, el habito de trotar es una terapia desestresante cuatica. Al principio lo veia como un cacho muy grande y más fome que la chucha, pero con el correr de los dias me termino gustando mucho, al borde de a veces carretiar muy tranquilamente para poder trotar bien al otro dia. La sensacion de libertad del trote es increible. Aunque es en plena ciudad y con cientos de autos alrededor, contaminacion, esceptisismo de nuestra rechuchesumadre sociedad, por 43 minutos (al menos yo) tengo un dialogo interno conmigo y la calle, plaza y/o recorrido. Creo que me quedare con este habito, pero bueno, lamentablemente yo digo muuuuchas cosas que jamas cumplo.
Saco anecdotas interesantes de estos 15 dias (casi todas son fomes, no se esperen mucho). Por ejemplo la cantidad de weones con que me he cruzado trotando y que jamas me lo habria imaginado, o los viejos que vienen de vuelta (han sido por lo menos 15) y te dan animo mientras vay trotando esperando lo mismo, quizas es un codigo de corredores que desconosco. Quizas la más memorable de las anecdotas es que a la vuelta del recorrido, como en el 4.3Ko sea cuando más hecho mierda estaba, pasaba por la piscina del club Balthus llena de minas exquisitas tomando sol o bañandose, generalmente gente de la farandula o tv.