martes, abril 22, 2008

¿MANIOBRA POLITICA O UN PRIMER PASO HACÍA LA DEMOCRACIA?

El levantamiento de algunas de las diversas restricciones civiles instauradas por la revolución ha provocado revuelo a nivel internacional y por supuesto, dentro de la isla. Ahora los cubanos tendrán libre acceso a la telefonía móvil, a comprar películas y reproductores de DVD y a artículos de computación. Todos artefactos que dentro de ciertos márgenes se puede entender que estén prohibidos por el régimen totalitario, ya que pueden mostrar las realidades y facilitar el acceso a otras ideologías u opiniones, pero claro, no deja de ser una practica horrorosa y totalmente condenable. Ya qué considero que prohibir al pueblo el acceso a cualquier bien o servicio, o instaurar cualquier tipo de restricción civil constituye una violación a los derechos humanos.

Vale la pena preguntarse ¿Por qué se produce este levantamiento?, y la respuesta resulta simple si vemos los hechos. A pocos meses del retiro de Fidel Castro y la sucesión del poder a su hermano Raúl, el pueblo cubano ha comenzado a perder la confianza en la revolución. Ya no poseen la imagen del líder que los había dirigido por tantos años, independientemente de los gustos políticos o de la felicidad de los pobladores. Cuba sabe lo poderoso que puede ser el pueblo, y por esta razón se les restringe.

Cuando Raúl Castro asume el poder, la opinión publica a nivel mundial comenzó a especular con el futuro de la isla. Se especulaba con la personalidad de Raúl Castro, a quién se le consideraba un tipo muy duro. Pero igual muchos se atrevieron a llamar a esta sucesión como el primer paso hacía la democracia. Lo que provocó la inmediata respuesta del nuevo líder, quién aseguró que el régimen comunista se mantendría. Pero la presión sobre él sigue siendo muy grande. Además, está la presión de (todavía) poseer un bajo nivel de aceptación popular. Lo que puede traerle un futuro muy complicado al nuevo mandatario. Y es por está razón que realiza estas reformas. Raíl Castro necesita ganarse a la gente, y a su vez, mostrarle al mundo una faceta más humana y menos totalitaria que la de su hermano. Muestra de esto fueron sus declaraciones donde aseguró que de a poco se irán levantando todas las restricciones que afectan al pueblo cubano.

Raúl Castro también ha mostrado está faceta en otras medidas, como las reformas en el área agrícola, que buscan eliminar los procedimientos burócratas y aumentar la producción, o el fin de la ridícula medida que permitía sólo una farmacia por barrio. Personalmente creo que Raúl además de querer ganarse al pueblo, tiene la intención de modernizar ciertos aspectos del régimen de su hermano, pero sin cambiar la ideología, ni las bases de la revolución.

Pero si revisamos las restricciones levantadas, podemos ver que todas poseen algún detalle. Ahora hay acceso a telefonía celular, pero sólo dentro de la isla, o el acceso a la computación e Internet, pero para determinados sitios. Por otra parte, la derogación de la restricción para que los cubanos no pudiesen acceder a los hoteles internacionales de la isla, no se informó de manera oficial ni en los medios de comunicación. La noticia se tuvo que conocer literalmente de boca en boca y consultando a los hoteles.

Creo que la transición hacía la democracia en Cuba es impensable en estos momentos. Raúl Castro posee una línea fuerte y tan sólida como su hermano, quienes juntos combatieron para lograr la revolución, y es muy difícil que puede ceder o reformar en algunos puntos. Pero al menos esta la intención de una Cuba más moderna y más humana, donde el pueblo sea visto como la base de la sociedad y no como un instrumento para acentuar el espíritu revolucionario.